Cien años de Relaciones Diplomáticas Japón - Bolivia

Japón y Bolivia celebran este año, centenario del establecimiento de relaciones diplomáticas. En este escenario es importante resaltar que, además de las relaciones diplomáticas, hay una relación histórica que comenzó hace 115 años con la llegada de los primeros inmigrantes japoneses a Bolivia.

Estos 100 años se podrían dividir en dos fases: la primera desde 1914 hasta 1941, cuando Bolivia acogió a los primeros inmigrantes japoneses; y la segunda desde 1952 hasta el presente. Entre 1942 y 1952, Bolivia declaró guerra contra el Japón, o sea contra los paises del eje, y rompió las relaciones diplomáticas con Japón. En la segunda fase hubo una nueva ola de inmigración japonesa: 1954 a la colonia Okinawa y 1955 a la colonia San Juan, en Santa Cruz.

Actualmente la cooperativa agropecuaria integral colonias Okinawa (Caico), así como la Cooperativa Agropecuaria Integral San Juan de Yapacaní (Caisy) tienen una producción agrícola y agropecuaria muy importante que contribuye a la seguridad alimentaria y al bienestar de la población boliviana.

Gracias a la hospitalidad y cariño del pueblo boliviano, los inmigrantes japoneses nunca crearon su propio círculo social cerrado, sino que se han integrado a la sociedad boliviana tratando de exponer la ética y la virtud de los japoneses.

En la década de 1960 empezó la cooperación financiera no reembolsable y la cooperación técnica a Bolivia, mientras en 1975 comenzó la cooperación financiera reembolsable (préstamos). Desde sus inicios hasta la fecha la cooperación financiera no reembolsable y la cooperación técnica del Japón a Bolivia suman alrededor de 1.731 Millones de dólares. En 2004 y 2006 el gobierno del Japón condonó los préstamos no pagados por Bolivia de la deuda oficial y de la deuda comercial por un monto de 715 millones de dólares.

La cooperación financiera no reembolsable del Japón a Bolivia siempre estuvo enfocada bajo el concepto de la "seguridad humana" que dice que se debe asegurar las condiciones de vida mínimas para toda la población. En este escenario la cooperación japonesa tiene el objetivo de "contribuir a la paz y desarrollo de la comunidad internacional, como una de las estrategias que coadyuven a mantener la seguridad y prosperidad del pueblo Japonés". Los resultados de la cooperación del Japón a Bolivia están traducidos en la construcción y equipamiento de hospitales y postas sanitarias, la construcción de escuelas, el mejoramiento y construcción de caminos vecinales, la disposición final de residuos sólidos, la perforación de pozos para agua potable, sistemas de agua potable, el mantenimiento de la infraestructura urbana, el apoyo al aumento de la producción de alimentos, el apoyo a la cultura y muchos otros programas y proyectos a lo largo y ancho del país.

Con la cooperación financiera reembolsable fue posible la ejecución de proyectos tales como el aeropuerto de Viru-Viru en Santa cruz, la construcción de la carretera Yucumo-Puerto Salinas y la reconstrucción de la vía férrea Ipías-Roboré, entre otros.

Shinzo Abe, primer ministro del Japón, recientemente dijo que hay tres cosas que los extranjeros deben conocer sobre Japón, además de que es un país que comparte el respeto a la libertad, la democracia y los derechos humanos fundamentales reconocidos por las leyes: primero, pone máxima importancia a la ayuda mutua entre ciudadanos; segundo, es un pueblo que ama la paz y ha venido caminando como país pacifista durante casi 70 años después de la segunda guerra mundial; tercero, Japón pone énfasis al valor de la laboriosidad, sinceridad y honestidad.

Actualmente el Japón tiene tres ejes principales en las relaciones con los países de latinoamérica: el primero es reforzar más la relación económica; el segundo, contribuir al desarrollo regional, y el tercero, la cooperación en el foro internacional. Entre Bolivia y Japón hay muchas cosas en común, entre ellas principalmente el respeto que tienen ambos países por el cuidado del medio ambiente, la naturaleza y la madre tierra.

Estos cien años de relaciones diplomáticas entre Bolivia y Japón nos muestra claramente que Japón es un país amigo y confiable para Bolivia.

(Fuente: Boletín Informativo ECOBOL 06/2014)

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